*** Antes que nada, quiero dejar claro que con s castellana me refiero a la s del español estándar de España, no a la de otras variedades como la canaria, la chilena, etc. ***
En
esta entrada de hoy vamos a hablar sobre la fricativa alveolar sorda (/s/) que
aparece tanto en inglés (en palabras como sail, nice
o awesome) como en castellano (por ejemplo, en sí,
casa o más). Pero ¡ojo! Aunque a grandes rasgos
puedan parecer la misma consonante (en ambas la lengua toca los alveolos y
produce un sonido sibilante, como de fricción, en el cual las cuerdas vocales
no vibran), no son sonidos idénticos.
Pero
¿cuál es la diferencia?
Si
hemos dicho que el punto de articulación, el modo de articulación y el voicing
son iguales, ¿en qué demonios se diferencian la s del inglés y la del
castellano? Pues, la verdad sea dicha, la diferencia es bastante sutil. Aunque
no haya completo acuerdo entre los fonetistas, la versión más extendida es que
ambos sonidos difieren en qué parte de la lengua toca los alveolos. En la s
castellana, supuestamente, es el ápcie (la punta) de la lengua lo que toca los
alveolos, produciendo un sonido más cercano a /ʃ/. En la inglesa, en cambio, la
lámina (es decir, la parte inmediatamente anterior al ápice) toca los alveolos.
Vale,
y estaréis pensando: "Esto no me aclara mucho cómo debo pronunciar la s
inglesa". Tranquilos, es muy fácil. Tenemos un truco que nos va a ayudar
mucho. Si intentáis imitar el silbido de una serpiente (pssssss), la s que está
sonando ahí es la s que queremos que suene cuando hablamos inglés. No tengáis
miedo de exagerarlo: marcar bien el sonido hará que la lengua se acostumbre más
fácilmente a la nueva articulación. Para los hablantes de vasco, la s inglesa
equivaldría a la z vasca en zura.
Bueno, y esto es todo. Como veis, la diferencia entre la s castellana y la s inglesa requiere un movimiento muy específico de la lengua, pero si lo ponemos en práctica sonaremos más naturales y con una pronunciación más parecida a la nativa.
¡HASTA LA PRÓXIMA!
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